En una ubicación tranquila y al mismo tiempo cercana a Ibiza se encuentra esta casa de campo que goza de unas bonitas vistas al verde paisaje hasta el mar.

Distribuida en dos plantas, la casa ha sido progresivamente renovada en los últimos años. Se ha mantenido un toque rústico con techos de madera en todas las estancias y con muros de piedra natural en el exterior.

Al entrar en la planta baja encontramos un comedor con acceso a un patio, dos dormitorios dobles, un baño completo y la amplia cocina con un segundo comedor que se abre al salón con chimenea y con salida al jardín.

El dormitorio principal con baño en suite se ubica en la primera planta con una terraza cubierta y acristalada y otra descubierta, ambas con unas bonitas vistas hasta el mar.

El extenso exterior encanta por su estilo mediterráneo, fácil de mantener. Aquí encontramos la zona de barbacoa con una acogedora terraza cubierta, la bonita piscina con un chill-out y una ducha exterior.

La habitación de invitados con un pequeño baño se sitúa con acceso individual cerca de la piscina.

La pacífica tranquilidad de esta zona así como su cercanía a las playas de Las Salinas y Es Cavallet hace de esta propiedad el lugar perfecto para vivir todo el año o disfrutar de nuestras vacaciones de verano.